La Memoria

La memoria
Los fallos de retención se producen cuando  la memoria no graba. Los notamos cuando no evocamos algo que , según creemos , deberíamos recordar. Sin embargo, la realidad es que nunca la registramos , por la que esse algo tan buscado sencillamente no está en la memoria, no existe. Pensamos que es falta de memoria cuando en realidad es falta de  atención.
Pocos saben mejor las faenas que nos hacen los despistes que los niños y adultos que se enfrentan a los retos del trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH), . Caracterizada por tener un componente hereditario importante, se suele hacer evidente en los primeros siete u ocho años. Los síntomas principales son fácil distracción y falta de control de la energía física que se manifiesta en impulsividad e hiperactividad. estos síntomas son intensos y persistentes, e interfieren con la adaptación al entorno social, con la conciencia, el aprendizaje y el rendimiento escolar. Se calcula que en Europa y Estados Unidos entre el 3 y el 5 por 100 de los menores entre siete y trece años están afectados por esta dolencia que no  infrecuentemente persiste durante la etapa adulta.
pero no es necesario padecer un problema de atención para darnos cuenta de que si queremos retener algo en la mente primero tenemos que enfocarlo. Por ejemplo, cuántas veces estamos haciendo alguna tarea y algo o alguien nos distrae,  al extremo de tener que  realizar la misma tarea, da la sensación de haber perdido el tiempo (no es así pues de las experiencias aprendemos y corregimos errores), o simplemente en una conversación, esperando decir algo, la idea se desvanece, por un despiste.
En tareas que las catalogamos como anodinas o de poco valor, la atención se desconecta, es normal, no debe en principio preocuparnos.  
Estos “lapsus” son de corta duración, segundos, ya he dicho que al no prestar atención no grabamos la que ocurre en nuestro cercano entorno, en otras ocasiones es la abstracción en nuestro interior lo que provocó el “despiste”. Cuando leemos, estudiamos, o hay que dedicar concentración a algo en particular, si en este momento se nos interpone otro pensamiento, preocupación o algo similar, se generará un desorden en nuestra mente, imposibilitando la atención, mejor tomarnos una tila, y a otra cosa mariposa, “estamos atascados”.

Atención a los prejuicios que se nos enquistan en la mente, cuando de forma sistemática, oímos que, la falta de memoria es consecuencia de enfermedades complejas e irreversibles, si hay preocupación, vayamos al médico, no suframos por eso.

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