Vivir sin depresión.

LA DEPRESIÓN

A un nivel sintomático(Indicio o señal de que una cosa está ocurriendo o va a ocurrir), la depresión se deja ver de diferentes maneras. Podemos sentir que no tenemos tanto apetito como antes, lo que antes era un manjar,  algo delicioso,  ya no tiene sabor. De la misma forma en que el depresivo percibe la vida, percibira los sabores: todo le dará lo mismo. Una persona depresiva puede llegar a perder peso considerablemente.

También podrá atravesar etapas de insomnio. Para el depresivo, conciliar el sueño es una dificultad grave. Puede pasar varias noches sin poder dormir o tener el sueño entrecortado.  Seguramente habremos observado al

guna vez algún depresivo tomar el camino opuesto: durmiendo durante largas horas cada día y manifestando con este síntoma un claro deseo de evasión de la realidad.

Podrá experimentar cambios en sus deseos sexuales. Para una persona deprimida, el sexo es lo último que le vino a la cabeza. Incluso algunos pierden todo interés por la sexualidad y se hacen inaccesibles a la seducción y a la excitación erótica. No es que no tengan deseos sexuales, en realidad, no tienen ganas de nada.

Mira, si es por eso por lo que estás pasando, por una depresión, el primer sitio  dónde se va a manifestar esta enfermedad, va a ser en el cuerpo, en el exterior del cuer

po, hay un proverbio que dice “de la hermosura del corazón  habla el rostro”,Es por eso que sí hoy queremos salir de una depresión en la que estamos inmersos, deseamos tenderle una mano para ayudar un ser querido, necesitamos saber que existen tres condiciones indispensables, y desarrollarlas  para sanar nuestro alma, nuestra psique y por ende nuestro cuerpo.

•  Debemos saber ilusionar, esta es motivo de vivir en plenitud.
• Tenemos que ser personas de coraje el que pelea, por algo específico, recobra su salud .

• Debemos y tenemos que saber transmitir optimismo como una de las formas es restar importancia a las enfermedades, y no centrarnos tanto en ellas, pues nos  restarán energía