Educar la Voluntad.

Si educamos la voluntad vamos a obtener pequeñas victorias.

Todos podemos recordar nuestra vida, diferentes fases en la que hemos pasado- exámenes, entrevistas de trabajo,- y todo esto va dando cuenta de nuestras metas, y la forma en la que las hemos resuelto cómo es nuestro bagaje vital, la forma de haber controlado y dominado la voluntad.

La voluntad es la capacidad para hacer algo anticipando consecuencias; una disposición interior para anunciar o renunciar; algo propio del hombre, tanto como la inteligencia y la afectividad.

La razón nos hace distinguir lo que no vale, o vale poco, y lo que es fundamental, nos enseña lo que es tener capacidad de síntesis y nos ayuda a definir una solución concreta en un momento determinado .La vida normal, habitual, Está compuesta por sentimientos qué es un estado subjetivo, personal, positivo o negativo, que suele tener un aspecto difuso, inconcreto, pero que nos hace y nos permite tomar el pulso a los impactos que nos rodean.Al mismo nivel que los sentimientos, viene la voluntad, algo que no se hereda coma ni se recibe por el color de los ojos, la estatura o el tipo morfológico la voluntad es una aspiración Que requiere una serie de pequeños ensayos y esfuerzos, hasta que, una vez educada coma se afianza y produce sus frutos.

Necesitamos para ir controlando la voluntad ser capaces de renunciar a la satisfacción que nos produce lo urgente, lo que pide pasó sin más. Lo inmediato puede superarse y rebasarse cuando existen otros planes, a los que nos hemos  ceñido y los hemos incluido en nuestro proyecto vital coma el cual no se improvisa, sino que se diseña punto esta configuración, lógicamente, supone muchas gracias. Y por otro lado muchas aceptaciones. La voluntad es determinación, firmeza en los propósitos, solidez en los objetivos y ánimo frente a las dificultades.Quién tiene educada la voluntad es más libre y puede llevar su vida hacia donde quiera. No es más libre cuando se hace lo que apetece, sino cuando se tiene capacidad de elegir aquí o qué  hace más persona coma cuando se aspira a lo mejor.

Hay que empezar siempre por tallas pequeñas e insistir una y otra vez en ellas sin desalentarse.Para fortalecer la voluntad lo mejor es seguir un programa de pequeñas tareas punto la persona con voluntad, si persevera, puede conseguir que sus sueños se hagan realidad

La voluntad conduce al más alto grado de progreso personal cuando se ha obtenido el hábito de hacer, no lo que sugiere el deseo, sino lo que es mejor, lo más conveniente, aunque, de entrada, sea costoso.

Toda la publicidad se apoya en lo contrario: estimular el deseo y crear necesidades inmediatas a nosotros los ciudadanos.

Conseguir que los hijos sepan controlar su fuerza de voluntad y tengan la capacidad y la preparación para afrontar las dificultades y los retos de cada día, no es así tan fácil, aunque si los padres les educan en este sentido desde que ellos sean aún muy pequeños, no es tan difícil de conseguirlo.

Los niños deben aprender a dominar sus impulsos, sus deseos y voluntades desde que son muy pequeños. De este modo, aprenderán no sólo a controlarse como también a esforzarse para conseguir lo que desean. Aprenderán que sólo con el esfuerzo se consigue y alcanza lo que se propone. Para lograr eso, es necesario hacer con que los niños conozcan sus fortalezas a través de una motivación positiva. Eso les promoverá una buena autoestima, madurez y responsabilidad, poco a poco.