Hay buenas razones para reírse.

Hay buenas razones para reírse.


https://cdn.pixabay.com/photo/2017/07/18/15/37/cry-2516128_960_720.pngEl valor de la risa: es difícil imaginar un mundo sin risas, pero si todo lo que hacemos sirve para algo a la naturaleza- la relación para asegurar que engendramos niños, el miedo para protegernos de los peligros- la risa nos hace sentir bien, es una recompensa que nos da la naturaleza. Cuando uno ríe, se genera neurotransmisores y hormonas  como la dopamina o las endorfinas, se excita todo el cuerpo y se relajan los músculos. En cada sentimiento o pensamiento que tienes afecta todo tu cuerpo. Porque este funciona como un todo. Así que cuando  sonríes, el cuerpo entiende que no estás en peligro y puedes sentir menos dolor físico. Además, la risa fomenta la colaboración y la cohesión social porque une a las personas, las entretiene y por tanto las incita a colaborar. La risa también potencia tu creatividad. Una de las razones por las cuales reímos es cuando el cerebro reconoce un patrón atípico: algo tiene el tamaño equivocado o está en el lugar equivocado, y esta capacidad de reconocer lo inhabitual tiene una recompensa, porque en el humor jugamos con ideas o conceptos de manera creativa. El humor es irreverente con los procesos lineales, lógicos, tradicionales y habituales, y por tanto fomenta el pensamiento flexible y la creatividad.
La capacidad de reír es innata, involuntaria e instintiva. Incluso los bebés sordos o ciegos se rien. Hay diferentes tipos de risas, y se pueden reconocer. Generalmente, la risa se da en un contexto social y se divide en cuatro tipos: la risa alegre que emites, por ejemplo,Cuándo vuelves a ver a un amigo que hace tiempo que no habías visto; la risa burlona, cuando te ríes de alguien después de vencerle en algo, qué sirve para mostrar desprecio y humillar al otro; la risa muy contagiosa que te sobrecoge cuando te ríes de algo o alguien que acaba de hacer el ridículo, cómo resbalar y tener una caída divertida o inesperada; y la risa que te da cuando te hacen físicamente cosquillas. La gente reconoce intuitivamente qué clase de intención tiene cada tipo de risa.
Reir nos ayuda a relacionarnos con los demás.Si utilizas el sentido del humor amable e inteligente para integrar a los demás, mejorarás tus relaciones sociales.Pero el humor agresivo- el sarcasmo- “no” ayuda a tener amigos,Ni tampoco te burles  exageradamente de ti mismo para hacer reír a los demás. Podemos enfrentar la tristeza, con un poco de risas o alguna gracia, exagerando los sucesos o las catástrofes con una mirada humorística porque esta nos ayudará a ver la perspectiva simpática; podemos poner igualmente una frase graciosa en nuestro lugar de trabajo o habitual del día; Asimismo podemos romper una racha de mal humor con cosas graciosas como las mencionadas anteriormente.
A reir se puede aprender, coje un espejo y ríete de ti mismo...

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